En nuestro catálogo puedes encontrar todo tipo de expositores pensados para artículos muy diferentes. Hemos realizado expositores especiales para aceite, para juguetes, para café y un largo etcétera. El diseño de cada uno de los expositores está pactado con el cliente para que tenga la apariencia que estos desean y sea representativo de la imagen del producto en concreto y de la marca en general.

El tamaño del expositor es importante

El tamaño del expositor, así como su resistencia, son quizás los factores internos más importantes de un expositor. Ambos vienen determinados por el tipo de producto que van a contener, así como por la posición que van a ocupar en un local comercial.

Por ejemplo, un expositor pensado para garrafas grandes de agua tiene que ser un expositor de gran tamaño, ya que lo que va a contener lo es. Además, tendrá que ser muy resistente porque estas garrafas tienen un gran peso y es necesario que lo soporte.

Si hablamos de otros artículos que pueden tener gran tamaño pero no tienen tanto peso, como por ejemplo bolsas familiares de aperitivos, ya no será necesario invertir en un expositor tan resistente.

El tamaño del expositor también va a depender de para dónde esté pensado. Por ejemplo, podemos hablar de expositores de pie para productos de maquillaje pensados para ser colocados en locales comerciales grandes en los que haya espacio para situar grandes promociones como las de este tipo de expositores.

Pero también los hay para poner en los estantes de los supermercados y tienen que ser necesariamente más pequeños para que puedan adaptarse al tamaño de estos lugares. Por último, también hay expositores para mostradores con ofertas concretas que se sitúan al lado del punto de pago.

Y el diseño también cuenta

Además del tamaño y de la resistencia del expositor también importa el tipo de diseño que se presente, es decir, su exterior. En su esencia, un expositor de agua puede ser similar a un expositor para juguetes, ya que ambos pueden tener algunos estantes, estar realizados en cartón y ser resistentes.

Pero evidentemente, el expositor para juguetes tiene que tener un diseño orientado a un público infantil, tiene que atraer a los niños a los cuales están dirigidos los artículos que contiene. Y el contenedor del agua también debe de atraer a un público concreto al que esté dirigido el tipo de envase que se está vendiendo.